Una mirada de fulgor fiero y ardiente
Y un tesón invencible y nunca ajado
Consiguió al fin, el tiempo por aliado ,
Alcanzar la meta que habitaba vuestra mente.
Millones de paquetes llovieron de repente
Sobre una naciente empresa y desparramaron
Un naciente imperio, que no sé si valoraron
Los que a vuestra sombra escaparon del relente.
Tú y tú forjásteis el recorrido
De aquel proyecto, eternamente naciente
Y no hubo desmayo en lo perseguido
Por vuestro sueño y vuestro empeño paciente,
Y lograsteis culminar el recorrido
Que os hizo dueños del amor de tanta gente.
Comentarios